Semana 2: 14-16 de febrero

            Esta semana tiene dos días no lectivos. Regresé a clase el día catorce y para mi sorpresa, el director del centro me envió a una de las clases de cuarto. Su idea era que volviéramos a rotar una semana en cada clase, para terminar de ver todos los cursos del centro. El año pasado, pase por quinto, tercero y primero y este año debía ver sexto, cuarto y segundo. Como tenemos este mes para hacer lo que nos plazca en las clases, he decidido llevar a acabo estas rotaciones.

             La clase de cuarto ha sido magistral. Son niños más pequeños y muchísimo más agradecidos. Su profesora está graduada con mención en ingles y su forma de dar clase es excepcional. En esta clase hay un niño con un claro trastorno del déficit de atención e hiperactividad (TDAH). Se alborota con facilidad y llega levantarse de la mesa para hablar a gritos cuando algo le inquieta. Aun así, funcionan muy bien y la profesora sabe guiarles con maestría.

            Para terminar, el viernes fuimos de excursión a un vivero en la ciudad de Toledo. Allí los niños aprendieron cosas sobre las plantas autóctonas, vieron cientos de tipos de arboles y arbustos y se llevaron una bellota plantada en una pequeña maceta de la que saldrá una encina.

             Me dió muchísima pena el despedirme de ellos. Solo compartí tres días con esa clase, pero me llevo un muy buen recuerdo.